Valencia, 19 de mayo de 2012. Bajo la coordinación de la Federació de Centres Juvenils Don Bosco de la Comunitat Valenciana, el pasado sábado 19 de mayo, tuvo lugar una de las nueve Mesas de diálogo estructurado que en estos días se están desarrollando en todo el territorio español, con motivo de los preparativos del 17 Congreso estatal de Centros Juveniles Salesianos, organizado por la Confederación de Centros Juveniles Don Bosco.
Bajo el lema “#DonBoscoaquíyahora. El centro Juvenil como respuesta a los retos de los y las jóvenes”, se celebrará del 12 al 14 de octubre de 2012 este congreso. Un espacio que cada dos o tres años congrega a más de 150 animadores y animadoras salesianos de toda España para reflexionar y estudiar temas de común interés y que permite dar orientaciones, líneas maestras y esbozar los objetivos de intervención de los próximos años en materia de infancia y juventud.
En esta ocasión, la Confederación Don Bosco junto a las 9 federaciones autonómicas que la integran han querido contar con la opinión de diversos actores y grupos que trabajan en el ámbito de la juventud y el tiempo libre educativo, con la intención de identificar junto a ellos las preocupaciones de la juventud y los retos de futuro que se deben afrontar como movimiento organizado. Estos espacios de debate servirán para elaborar los contenidos y materiales a trabajar durante el 17 Congreso. Para ello han sido convocadas distintas mesas de diálogo estructurado compuestas por representantes de distintas organizaciones.
La mesa de diálogo estructurado de la Comunidad Valenciana se desarrolló con la participación de: Sandra Gómez, Presidenta del Consejo de la Juventud de la Comunitat Valenciana; Ignacio Grande, vicepresidente del movimiento juvenil Junior de la diócesis de Valencia; Mario Jordá, Gerente de la Confederación Don Bosco; Ramón Naval, representante de Moviment escolta de Vaelncia; Amparo Martínez, vocal de educación del Consell de la Juventut de Comunitat Valenciana; Francisco López, Presidente de la Plataforma del Voluntariado de la Comunitat Valenciana; Luis Noguerol, de Culturama; Lourdes Mirón, Presidenta de Jovesolides y David Junquera e Iñaki de UPD. Moderó la mesa Raúl Hernández, presidente de la Federació de Centres Juveniles Don Bosco de la Comunitat Valenciana.
Raúl Hernández, sometió a consideración distintos temas identificados a priori por su relevancia e interés para los y las jóvenes: Las nuevas formas de tiempo libre, nuevas formas de voluntariado, nuevas formas de participación juvenil, la atención a la diversidad y la interculturalidad, el empleo juvenil y la emancipación. Los asistentes a la mesa destacaron además otras preocupaciones como: los recortes de derechos en materia de educación, la escasa integración de los jóvenes procedentes de otros países, la dificultades de integración que todavía existen en materia de diversidad sexual o las dificultades de las personas con distintos tipos de disfuncionalidad.
Sin embargo, el tema que ocupó la mayor parte del diálogo fue las nuevas formas de participación juvenil. Se partió de un titular escalofriante: La La participación social juvenil se hunde. 92 % de los jóvenes no pertenece a ninguna organización. El 3,4 % pertenece a una ONG el 2,6 % a una asociación y el 2 % a un partido político. Fuente: INJUVE. Sondeo de opinión y situación de la gente joven. (2a encuesta 2011). Este dato contrasta, según un amplio consenso de los asistentes de la Mesa de Diálogo, con la existencia de nuevas formas de participación juvenil no organizadas: redes sociales e internet, nuevas tecnologías, movimientos sociales, nuevas formas de comunicación, etc. Los y las jóvenes cada vez participan menos de la forma tradicional organizada, sin embargo, surgen nuevas formulas también válidas de expresión y participación.
Ante esta realidad, se pidió a los asistentes que identificaran cuales son los retos que el movimiento asociativo Juvenil debe afrontar. Se apuntaron algunas pistas: la necesidad de reinventar las formas de organización del movimiento asociativo juvenil adaptándose a estas nueva realidad, se habló de la necesidad de canalizar y catalizar esta energía de participación no organizada hacía formas más estructuradas y eficaces, se apuntó la necesidad de abrir espacios en las entidades juveniles para escuchar y dar cabida a la voz de los jóvenes. También se constató la importancia de dar valor a la experiencia organizativa de las entidades juveniles como espacios válidos de intervención y de reivindicación.
En definitiva, se observa que el movimiento asociativo de la juventud valenciana busca la manera de adaptarse a las nuevas formas de participación juvenil, poniendo a disposición de los jóvenes su experiencia y buen hacer como estructuras organizadas. Un movimiento que es consciente de que hoy, más que nunca es necesario escuchar la opinión y propuestas de los jóvenes que están alzando su voz y quieren un mundo más justo e igualitario.