Arranca en Xàtiva la segunda edición de La Ventanilla Indiscreta con un experimento social entorno al trabajo decente en el sector de los cuidados y el hogar, desempeñado mayoritariamente por mujeres migrantes en condiciones muy precarias
¿Qué pasaría si de repente desapareciesen los trabajos del hogar y los cuidados en España? ¿Cómo cambiaría nuestra vida si no pudiéramos contar con el apoyo de esas profesionales que nos ayudan a cuidar a nuestros hijos e hijas, a hacerse cargo de nuestros mayores o que vienen a casa a limpiar o cocinar? Sin duda, nuestra rutina actual sería muy difícil de mantener y, en muchos casos, incluso imposible.
Ésta es la situación ficticia que La Ventanilla Indiscreta ha planteado a un grupo de personas mayores de Xàtiva para generar una reflexión entorno a las hiperprecarias condiciones de trabajo en el ámbito de los cuidados y las labores del hogar. Se les informó de que la Comisión Europea había adoptado esta drástica decisión hasta que en España no se garantizasen unas condiciones dignas de trabajo en el sector y ésta fue su reacción.
Superado el shock inicial y tras unos días de reflexión individual, se ha celebrado un debate en la Casa de la Cultura de Xàtiva en el que han participado la concejala Xelo Angulo y María Eugenia Ramírez, portavoz de la asociación Mujeres 5C por la Interculturalidad. Las personas participantes han abordado la precarización de esta profesión, desempeñada mayoritariamente por mujeres de origen migrante sin contratos, con jornadas de trabajo extenuantes, sin seguridad y con salarios por debajo del SMI.
Xàtiva ha acogido el primer experimento de la segunda edición de La Ventanilla Indiscreta, un proyecto de sensibilización social impulsado por Jovesólides que trata de identificar algunos de los prejuicios más extendidos entre la población para afrontarlos a través de la acción social y la reflexión. En los próximos meses, otros tres municipios de la Comunitat Valenciana acogerán experiencias similares sobre otros temas relacionados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por un trabajo decente para las cuidadoras y trabajadoras domésticas
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), al menos 67 millones de personas en todo el mundo desempeñan trabajos en el ámbito del hogar y los cuidados de las cuales en torno al 80% son mujeres y de ellas, un 20% son migrantes internacionales.
Estas cifras implican que muchas mujeres, y en particular las mujeres migradas, trabajan en condiciones precarias que incluyen un empleo informal, en hogares privados, con frecuencia sin condiciones de empleo claras, sin estar dadas de alta en la Seguridad Social y fuera del alcance de la legislación laboral. Reciben salarios muy bajos, tienen jornadas de trabajo muy largas y no tienen garantizado un día de descanso semanal. Incluso, algunas veces están expuestas a abusos físicos, mentales y sexuales o a restricciones de la libertad de movimiento. Además, es habitual que se les denieguen licencias por enfermedad, maternidad o para el cuidado de familiares.
El 28% de los empleos del hogar y los cuidados en la UE se concentran en España, donde casi 600.000 personas realizan trabajos domésticos según la Encuesta de Población Activa (enero 2023). Una de cada tres no tiene contrato y percibe un sueldo inferior al salario mínimo interprofesional. Casi todas las trabajadoras son mujeres, el 90% de origen migrante. Además, una de cada tres vive en situación de pobreza.
La Ventanilla Indiscreta es un proyecto de educación para el desarrollo y la ciudadanía global financiado por la Vicepresidencia segunda y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda con cargo a la asignación presupuestaria procedente del IRPF. Puedes seguir toda la actualidad del proyecto en los hashtags #VentanillaIndiscreta en redes sociales.